Comprometerse con esa persona especial es uno de los mejores momentos de nuestra vida. Sin duda, compartir con alguien el resto de tu vida es una gran decisión. 

Pero ¿has pensado alguna vez dónde se originó esta tradición de pedirle la mano a tu ser amado? Si quieres saber la respuesta, ¡este artículo es para ti!

Hoy, en TuDiamante, te contamos todos los detalles que hay detrás de esta hermosa tradición y dónde va el anillo de compromiso. Así podrás preparar a la perfección ese gran momento de tu vida. Ponte cómodo, ¡y empezamos!

¿Cómo surgió la tradición de pedir la mano?

La tradición de pedir la mano de la persona con la que se desea contraer matrimonio es una de las más importantes en el mundo de hoy, pues, representa un momento de mucha emoción y suele convertirse en un recuerdo para toda la vida. Tiene su origen en Egipto, siendo un símbolo de enlace y compromiso con la persona a la que se le hace entrega del mismo, la cual toma mayor arraigo a partir del siglo XVIII.

Pero en la Antigua Roma, más allá de ser un acto de amor y compromiso, tenía un interés económico de por medio. La alianza de boda era vista como un negocio y el cariño se cultivaba con el paso de los años.

En esa época, las mujeres no tenían derechos y les pertenecían a sus padres hasta que llegara su pretendiente. Así surgió el concepto de la pedida de mano: en ese entonces, existía una ley llamada «nanus» (mano, en español). 

El «nanus» consistía en que un hombre, ya sea el padre o el esposo, tenía poder jurídico sobre la mujer. Entonces, el pretendiente tenía que pedirle al papá de la chica que le otorgaran el «nanus». Es decir, el poder sobre ella.

Esta tradición siguió extendiéndose a través de los años, a pesar de que las mujeres lograron adquirir sus derechos en la sociedad. Hoy en día, algunos novios, antes de entregar el anillo de compromiso, les piden el permiso a los padres de la chica como signo de respeto. 

Mediante este gesto, los pretendientes quieren lograr la aprobación y el respaldo de la familia, nada similar a lo que se hacía hace siglos atrás.

La propuesta de matrimonio también cuenta con una serie de tradiciones, las cuales giran alrededor del anillo de compromiso. La más conocida suele ser que la persona que está haciendo la propuesta se arrodille, siendo este un simbolismo heredado de las tradiciones monárquicas que impregnaron muchas de las costumbres que tiene el mundo en la actualidad.

Desde el Antiguo Egipto, se acostumbra a entregar una sortija de compromiso a las mujeres, tradición que adoptaron los griegos y luego romanos al obsequiar un anillo de hierro. Posteriormente, los cristianos y judíos también heredaron esta costumbre para luego contraer matrimonio.

Desde la Edad Media, los anillos empezaron a hacerse con gemas, entre ellas el diamante, gracias a su belleza, elegancia y exclusividad. Esta piedra preciosa era la favorita de la aristocracia por sus características físicas. La primera en lucir un anillo de promesa de diamantes fue María de Borgoña en el año 1477.

Por otro lado, la tradición de que el novio no pueda ver el vestido de novia ni ver a la mujer antes de la boda también existe desde hace mucho tiempo.

Con el paso de los años, se han cambiado las formas de adquirir un anillo de pedida, al igual que su material, ya que se incorporó el anillo de oro e incluso oro blanco. Tradicionalmente, se adquieren en joyerías. Sin embargo, actualmente, también existe la opción de comprarlos por internet o incluso en redes sociales.

¿En qué dedo va el anillo de compromiso? 

El dedo en el cual se debe colocar el anillo de pedida suele ser una de las dudas que se tienen en la preparación de la solicitud de matrimonio. En tal sentido, generalmente,  el anillo de compromiso se coloca en el cuarto dedo de la mano izquierda, teniendo como significado la relación que existe desde este punto hasta el corazón, por medio de la llamada «vena amoris».

La localización de la vena del amor ha guiado esta tradición que se ha mantenido como un símbolo del camino que se recorre hasta una fecha tan significativa, como lo es la del día del matrimonio, en la cual el anillo pasa al anular de la mano derecha. 

Sin embargo, existen países en donde los anillos de promesa se colocan en el dedo anular de la mano derecha, especialmente en países europeos como Croacia, Suiza o España (a excepción de Cataluña y la Comunidad Valenciana, donde se coloca en la mano izquierda). También hay casos como los Estados Unidos, Alemania, Noruega, Turquía o Rusia en donde ambos anillos se colocan en el dedo anular de la mano izquierda. 

Independientemente de dónde vaya el anillo de compromiso, es fundamental escoger una joya de calidad. En TuDiamante sabemos la importancia de este momento para ti. Por ende, hacemos los mejores anillos de compromiso: pensamos siempre en la calidad y elegancia.

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¿Cómo se usa el anillo de compromiso después de la boda?

Es bastante normal la confusión que existe sobre lo que se debe hacer con el anillo de compromiso una vez se realiza la boda, teniendo como resultado que muchas personas simplemente no vuelvan a usar su anillo después de casados. A pesar de esto, el anillo de compromiso puede seguir siendo utilizado y existen diversas formas de llevarlo.

Lo más común es que se lleven ambos anillos en el dedo anular de la mano derecha, colocando el anillo de bodas en la parte inferior y el de compromiso por encima. Otras personas optan por soldar ambos anillos y llevarlos juntos como una unidad. Asimismo, algunas personas eligen llevar ambos anillos, uno en la mano izquierda y otro en la mano derecha.

En países como México, es usual poner el anillo de compromiso en el dedo anular izquierdo. Normalmente, el anillo de casado queda por encima del de compromiso. Demostrando así una manera de reafirmar el compromiso y el símbolo de amor eterno.

Sin embargo, otras personas optan por la opción de sustituir el anillo de compromiso por las argollas de matrimonio.  El anillo de compromiso se conserva en un joyero y el anillo de bodas pasa a ser el protagonista a partir de la boda y la luna de miel. 

Esto se hace con la finalidad de que el anillo de compromiso lo hereden a las próximas generaciones para sus respectivas pedidas de mano o el día de la boda. Este último gesto suele ser muy dulce también por el significado familiar que tiene el anillo.

No obstante, en algunas ocasiones, el anillo de promesa pasa a ser el anillo de bodas. Esto ocurre en casos donde la mujer queda fascinada con su joya y crea un vínculo emocional tan fuerte que lo quiere tener presente para el gran día. 

Esto cada vez sucede con más frecuencia y la única diferencia, según sea el caso, es que se cambia el anillo de la mano izquierda a la mano derecha de la novia, y viceversa, después de la boda. 

En TuDiamante, ya te dimos algunas ideas de cómo puedes usar tu sortija de compromiso después de la boda, así como también en qué dedo va y el origen de toda esta hermosa tradición. Por esta razón, siempre es importante escoger un buen anillo tanto de compromiso como de matrimonio.

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