¿Alguna vez te has preguntado si un diamante de laboratorio es genuino? ¿Te ha llamado la atención este tipo de diamante, pero no estás seguro de comprarlo? ¿Sabes qué tanto se asemeja a un diamante natural? Aquí te respondemos estas y otras interrogantes para que conozcas cómo se determina su valor.

¿Qué es un diamante de laboratorio?

Los diamantes de laboratorio se han formado con la misma composición química de los diamantes naturales, con la única diferencia de que el proceso se aceleró bajo control en un laboratorio. 

Los diamantes de laboratorio son diamantes reales. También son llamados diamantes sintéticos, pero a pesar de no haberse creado en lo profundo de la corteza terrestre, a simple vista son prácticamente idénticos y tienen la misma calidad y durabilidad que los diamantes extraídos de una mina.

¿Cómo se crea un diamante de laboratorio?

La creación de un diamante de laboratorio es un proceso fascinante que combina ciencia y tecnología. En este apartado, te enseñaremos los pasos clave para su creación en un entorno de laboratorio controlado, con dos métodos principales. 

Método HPHT

Los diamantes creados con el método alta presión combinada con alta temperatura (HPHT) siguen un proceso de formación muy similar al que ocurre de manera natural.

La semilla se pone en una prensa mecánica con material de carbono en la que se combinan una alta presión y altas temperaturas. Esto hace que el carbono se separe rápidamente, se una al diamante semilla frío y se vayan formando nuevas capas hasta lograr que aumente de tamaño y se forme el diamante completo.

Método CVD

La deposición química de vapor (CVD) es un proceso que comienza con un pequeño diamante semilla en una cámara de reactor de plasma con una mezcla de gases de carbono a baja presión.

En el método de vapor químico se usan gases como el metano que se calientan mediante el uso de microondas y se genera el plasma. Debido a las altas temperaturas, las moléculas de gas se separan para facilitar la unión de los átomos de carbono a la semilla, capa por capa, hasta producir un diamante completo.

¿Cuáles son las principales características de un diamante de laboratorio?

Los diamantes de laboratorio comparten muchas de las características de los diamantes naturales. Aquí te compartimos algunas de las principales, para que las tengas en cuenta a la hora de escoger:

Composición química

Los diamantes de laboratorio o diamantes cultivados están compuestos enteramente de carbono, al igual que los diamantes naturales. Su estructura cristalina es idéntica, lo que les otorga las mismas propiedades físicas y ópticas.

Color

Al igual que los diamantes naturales, los diamantes de laboratorio pueden ser incoloros o exhibir una variedad de colores como amarillos, rosados o azules intensos. La presencia o ausencia de impurezas y defectos determinará el color del diamante.

Tamaño y forma 

Los diamantes creados pueden tener una amplia gama de tamaños y formas, al igual que los diamantes naturales. Desde pequeños diamantes hasta grandes piedras para joyería de lujo.

Certificación

Al igual que los diamantes naturales, los diamantes de laboratorio se pueden certificar. Se envían a un instituto de gemas especializado en la graduación de diamantes certificados para que varios gemólogos los evalúen de forma independiente. Los grados individuales son compilados y comparados para definir el grado final del diamante de laboratorio. 

No todos los joyeros clasifican los diamantes artificiales y no todos estos diamantes son clasificados. Por lo general, las gemas más pequeñas no son certificadas.  

Los tres principales laboratorios internacionales de gemología del diamante son el Gemological Institute of America (GIA), el Hoge Raad voor Diamant (HRD) y el International Gemmological Institute (IGI). Estos laboratorios entregan certificados cuando los diamantes tienen exactamente las mismas características ópticas, físicas y químicas que los diamantes naturales. 

Belleza

Los diamantes de laboratorio tienen el mismo brillo de los diamantes naturales. Ambos tipos de diamantes muestran un destello increíble, belleza, durabilidad y son clasificados según cuatro criterios de calidad (4 C por las siglas en inglés): peso (carat), color (colour), pureza (clarity) y corte o talla (cut).

Opción ética

Los diamantes de laboratorio son considerados una excelente opción de diamantes éticos; es decir, que no son extraídos de las minas de manera ilegal, mediante procesos que afectan el medio ambiente.

Existe una cláusula de garantía denominada Proceso Kimberley que le indica a cualquier consumidor que los diamantes adquiridos no son «diamantes de sangre» para financiar países en conflictos o bélicos.

Diferencias entre un diamante de laboratorio y un diamante natural

Como viste, los diamantes de laboratorio y los diamantes naturales comparten en su mayoría las mismas características. Sin embargo, también presentan algunas diferencias importantes. Aquí te dejamos las principales:

Ya sea que elijas un diamante de laboratorio o un diamante natural, lo más importante es que encuentres una joya que te haga sentir especial y que refleje tu estilo personal. Ambos tipos de diamantes pueden ser deslumbrantes y capaces de crear recuerdos inolvidables.

No hay una respuesta definitiva sobre cuál es el mejor diamante. La elección recae en ti, en tus necesidades y preferencias. Explora las opciones, haz preguntas y elige con confianza el diamante que mejor se adapte a ti. 

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